Daniels TE, Jordan RC. Diseases of the mouth and salivary glands. In: Goldman L, Schafer AI, eds. Goldman-Cecil Medicine. 26th ed. Philadelphia, PA: Elsevier; 2020:chap 397. Show Hupp WS. Diseases of the mouth. In: Kellerman RD, Rakel DP, eds. Conn's Current Therapy 2020. Philadelphia, PA: Elsevier 2020:1000-1005. Sciubba JJ. Oral mucosal lesions. In: Flint PW, Haughey BH, Lund V, et al, eds. Cummings Otolaryngology: Head & Neck Surgery. 6th ed. Philadelphia, PA: Elsevier Saunders; 2015:chap 89. Page 2Gailani D, Wheeler AP, Neff AT. Rare coagulation factor deficiencies. In: Hoffman R, Benz EJ, Silberstein LE, et al, eds. Hematology: Basic Principles and Practice. 7th ed. Philadelphia, PA: Elsevier; 2018:chap 137. Hall JE, Hall ME. Hemostasis and blood coagulation. In: Hall JE, Hall ME, eds. Guyton and Hall Textbook of Medical Physiology. 14th ed. Philadelphia, PA: Elsevier; 2021:chap 37. Neff AT. Von Willebrand disease and hemorrhagic abnormalities of platelet and vascular function. In: Goldman L, Schafer AI, eds. Goldman-Cecil Medicine. 26th ed. Philadelphia, PA: Elsevier; 2020:chap 164. Page 3Versión en inglés revisada por: Todd Gersten, MD, Hematology/Oncology, Florida Cancer Specialists & Research Institute, Wellington, FL. Review provided by VeriMed Healthcare Network. Also reviewed by David Zieve, MD, MHA, Medical Director, Brenda Conaway, Editorial Director, and the A.D.A.M. Editorial team. Traducción y localización realizada por: DrTango, Inc. Page 4Chernecky CC, Berger BJ. Prothrombin time (PT) and international normalized ratio (INR) - blood. In: Chernecky CC, Berger BJ, eds. Laboratory Tests and Diagnostic Procedures. 6th ed. St Louis, MO: Elsevier Saunders; 2013:930-935. Lee GM, Ortel TL. Antithrombotic therapy. In: McPherson RA, Pincus MR, eds. Henry's Clinical Diagnosis and Management by Laboratory Methods. 24th ed. Philadelphia, PA: Elsevier; 2022:chap 43. Schafer AI. Approach to the patient with bleeding and thrombosis. In: Goldman L, Schafer AI, eds. Goldman-Cecil Medicine. 26th ed. Philadelphia, PA: Elsevier; 2020:chap 162. Page 5Las recomendaciones de vitamina K, así como otros nutrientes, se proporcionan en las Ingestas Dietéticas de Referencia (IDR) desarrolladas por la Junta de Alimentos y Nutrición en las Academias Nacionales de Ciencias, Ingeniería y Medicina. IDR es un término para un conjunto de ingestas de referencia que se utilizan para planificar y evaluar la ingesta de nutrientes de las personas sanas. Estos valores, que varían según la edad y el sexo, incluyen: Consumo diario recomendado (CDR): el nivel diario promedio de ingesta que es suficiente para satisfacer las necesidades de nutrientes de casi todas las personas sanas (97% a 98%). Una dosis diaria recomendada es un nivel de ingesta basado en evidencia de investigación científica. Ingesta adecuada (IA): este nivel se establece cuando no hay suficiente evidencia de investigación científica para desarrollar un CDR. Se establece en un nivel que se cree que garantiza una nutrición suficiente. Lactantes (IA)
Niños (IA)
Adolescentes y adultos (IA)
Beber un café caliente o un zumo de naranja puede ser muy molesto cuando se tienen llagas en la boca. Incluso, hablar puede suponer un esfuerzo por el dolor que generan estas pequeñas heridas. Por ello, aunque no son graves y en la mayoría de las ocasiones se curan solas, las aftas o llagas, ulceraciones que generalmente se dan en la superficie mucosa de la cavidad oral, son una afección que es mejor prevenir. Hay quienes las padecen en momentos puntuales y personas que se llevan enfrentando a ellas en repetidas ocasiones desde niños. Un tercio de la población tiene o ha tenido llagas o aftas en su boca. Qué es un afta o una llaga bucalLas heridas que suelen salir sobre todo sobre la mucosa de la cavidad oral, como el interior de las mejillas, la lengua, el paladar blando o la base de las encías, son lo que se denominan aftas bucales. Se trata de llagas abiertas con forma redondeada u ovalada, de color blanquecino o amarillento, normalmente con un halo rojizo alrededor. Su tamaño oscila entre los 3 y los 8 milímetros y pueden aparecer en solitario o en varios grupos de hasta 20 o más, lo cual afecta de manera considerable a la calidad de vida, puesto que resultan dolorosas. Tipos de llagasLos especialistas hablan de tres tipos de aftas o llagas en función de su morfología. Están las aftas menores, que suponen el 80% de los casos de estas afecciones, que aparecen principalmente en solitario y que se suelen curar de manera espontánea a los siete días. Las aftas mayores, con un tamaño de más de 1 centímetro, se resuelven en unas semanas, pudiendo dejar una cicatriz residual. El tercer grupo al que se refieren los expertos son a las llagas herpetiformes, que son los casos en los que salen numerosas úlceras, con un tamaño pequeño (de entre 1 y 3 milímetros) y que desaparecen en semanas, dejando en ocasiones alguna marca residual. Asimismo, se pueden diferenciar entre lesiones agudas, crónicas y recurrentes. Las de tipo recurrente, que afectan al 20% de la población general, suelen aparecer por primera vez durante la infancia, pero son en la adolescencia y durante el comienzo de la edad adulta las etapas de la vida en la que más nos afectan. Con el paso de los años, es más difícil padecerlas. Por qué salen llagas o aftas en la boca: causas y motivosAunque como hemos apuntado suelen ser de causa desconocida y hay casos en los que no se puede determinar el origen de este tipo de afecciones bucales, pueden ser consecuencia de:
Síntomas y diagnósticoNo son lesiones graves, pero sí muy molestas, puesto que provocan dolor al comer o beber, pero, incluso, molestan al hablar. Es fácil detectarlas porque son manchas blanquecinas con bordes rojos y de pequeño tamaño que se vuelven grises cuando comienzan a curarse. Así que el odontólogo puede realizar el diagnóstico observando las heridas. Comienzan con una sensación de ardor u hormigueo, dando paso a la aparición de un pequeño bulto rojo, para terminar con una herida abierta. En algunos casos, provocan síntomas de malestar o indisposición general, fiebre o inflamación de los ganglios linfáticos. TratamientoNormalmente se curan solas, pero para acelerar el proceso, los expertos aconsejan no tomar comidas con muchos condimentos y reducir la ingesta de alimentos ácidos, como los cítricos. Además, es posible aliviar el dolor y tratar la inflamación, por ejemplo, con anestésicos locales o antiinflamatorios tópicos, que debe recetar el odontólogo. También son útiles remedios caseros como enjuagarse la boca con agua y sal. En los casos en los que las aftas son persistentes -más de dos semanas con cuidados personales- o recurrentes -más de dos o tres veces al año-, hay que acudir al médico para que determine otros posibles desencadenantes. Aunque las aftas no son ningún tipo de cáncer ni lo provocan, hay algunos tumores que pueden surgir primero como una úlcera bucal que no termina de sanar, según recoge la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos en su web. Para prevenir su aparición, sobre todo en personas que las padecen de manera regular, los expertos aconsejan evitar los alimentos ácidos, picantes o muy calientes; llevar una dieta equilibrada con especial atención a los alimentos que ayuden a mantener niveles adecuados de hierro, ácido fólico, vitamina B y zinc, y tener una buena higiene bucodental, con el uso de cepillos suaves y cambiándolos con regularidad. Imágenes | iStock/ b-d-s/p_saranya/champja |